Me pregunto por el uso de la dialéctica como herramienta
para el engaño y, también de los
silencios que evitan mencionar la
evidencia para utilizando tan solo una parte de la verdad, engañarnos. «Una
verdad a medias es una mentira», y en España que se tiende a engañar
permanentemente, no siempre se coge al
mentiroso antes que a un cojo, como dice el refranero, suele pasar que el
defraudador, presunto siempre, cuando se trata de negocios, suele bordear la
justicia y quedar impune.
Comenta Elena la duquesa de Lugo al ser preguntada sobre
las críticas al Rey: “No he oído nada, he estado trabajando", un día
después su padre, pide perdón y, lo hace con una propuesta diametralmente
opuesta a su comportamiento.
Tras una conducta de mozo jaranero, muy galán y algo
torero, que decía el poeta, aparece el viejo rezador, afligido, preocupado por
volver cuanto antes a sus asuntos, los palaciegos, los de siempre, de casta le
viene al galgo, no cabe duda.
Resulta curioso ver a las infantas acogerse a la tendencia
de no enterarse de nada, puesta de moda con éxito evidente por Ana Mato,
quien evitando las evidencias del coche Jaguar y otros presentes llegados
a su casa como regalos de mano de la
Gürtel, cuando estaba casado con el imputado Jesús Sepúlveda (“no me consta
nada” dijo), ha conseguido ocupar plaza en los consejos de ministros.
Quizás por tener claro la manipulación mediática de los
problemas, me importan relativamente las andanzas de la monarquía que poco a
poco ve como encoge la manta que tapa sus vergüenzas.
Me preocupa la cortina de humo que la imagen patética de
un señor comporta a los verdaderos y reales problemas de un país, en el que los
gobernantes mediante el silencio (verbigracia el
mantenido antes de las elecciones), para evitar decirnos la verdad y, la
manipulación mentirosa de la palabra, tratan de justificar lo que pocos días
atrás calificaban de inaceptable.
Los
pensionistas con independencia de sus años trabajados y cotizados, pagarán una
parte del importe de las recetas para sus tratamientos médicos. Pero esta
resulta ser una buena noticia, pues algunos así nos la cuentan.
No
hay escrúpulos para convertir lo negativo en positivo, por ejemplo como el
hambre no gusta, hablamos del día de la alimentación y todo parece más
reposado. El problema es que el hambre no tiene otro nombre para quines la
padecen y en este país, cada día más ciudadanos sufren a espaldas de patriotas que, ¿seguirán saliendo a la calle en defensa de la familia?.
Es que cada día me duele más mi pais y, sinceramente, se quitan las ganas de usar las palabras que otros manipulan.
ResponderEliminarLa mentira y el cinismo están destrozando la política y la democracia. Empezamos a estar en manos de unos impresentables...
ResponderEliminarSaludos
Y sin embargo, la ciudadanía es propensa a tragarse la mentira. Aznar, por ejemplo mintió sobre Irak, y aún no ha perdido perdón. Zp mintió al decir que no había crisis en España y no ha pedido perdón, Rajoy mintió en toda la campaña electoral y tampoco pide perdón. Felipe no lo ha pedido por la guerra sucia ni Matas por robar. Ha pasado algo?
ResponderEliminarsaludos
Txema, cierto que por disculparse y reconocer no solo no pasa nada, por el contrario se gana credibilidad, aunque en este caso, personalmente de un poco igual, pues ni siquiera se de que se arrepiente. Me preocupa esa pensión intocable de nuestros mayores, obligados a pagar la cuota de su comunidad y comer un poquito.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Permíteme que te corrija: una mentira a medias es doble mentira.
ResponderEliminarHay que ser desvergonzados y muy faltos de moral y de principios éticos para, con la disculpa de que no hay dinero, decir que precisan recortar en Sanidad y Educación 10.000 millones, justo unos días después de haber inyectado (me gusta la palabra, porque esconde la real, que es dado) 50.000 millones a la banca para subsanar los agujeros de las fusiones de las cajas y bancos que han sido mal gestionados por unos señores que se han retirado con indemnizaciones multimillonarias y jubilaciones que todos quisiéramos.
Y hay que ser, además de lo ya dicho, inepto e incompetente en su trabajo, para no encontrar otra solución que golpear a los que menos ganan y más necesitan los medicamentos, para empezar a recortar una parte de esos 7.000 millones que corresponden a la Sanidad. Pienso yo, y no resulta ningún trabajo excesivo el pensar, que bien podrían empezar por las propias empresas químicas y farmacéuticas, que son las que manejan todo este cotarro y las que se han hecho, y están haciendo, de oro gracias a las enfermedades de los demás y sus fármacos, y las que hacen que el sistema sanitario de cualquier país se tamabalee por su culpa. Podrían empezar por hacer cajas de fármacos con las dosis ajustadas a las necesidades que normalmente una determinada enfermedad aguda precisa, en vez de hacerlas el doble de grandes para crear un remanente que no vale para nada, pero que les sirve para cobrar el doble. Podrían ajustar los precios, dados los grandísimos beneficios que tienen, y que se escudan que son para la investigación, lo cual es mentira, ya que no persiguen la curación de una enfermedad, sino su mantenimiento dentro de unos límites aceptables, para seguir fabricando la medicina; la curación de una enfermedad significaría su ruina como empresa, y eso va contra los principios del sistema.
También existen otras formas de conseguir más dinero, como aumentar los impuestos a las grandes fortunas, imponer la tasa Tobin, perseguir la evasión y el fraude fiscal, retirar los privilegios y prebendas a la Iglesia Católica...etc., pero ya no insistiré por no hacerme demasiado pesado. Pero que quede claro, que engañar, ya no nos engañan a nadie.
Un abrazo.
Conforme Carlos, tal cual lo planteas, pero hay un par de problemas en relación a la forma de conseguir el dinero:
ResponderEliminar1,- No perjudicaran nunca sus propios intereses incluida su fe
2,- Creo aún engañan y, lamentablemente a muchos. Fíjate cuantos ratones pensaron que sería el gato quien defendiera en las pasadas elecciones.
Y como siempre,los más débiles pagando los platos rotos. Eduardo Galeano dijo una vez que... "America latina fabrica pobres y prohibe la pobreza", pues lo mismo, se ve que los del PP están haciendo lo mismo pero en España y si encima hacen caso de las sugerencias del FMI con relación a lo que vivimos y duramos los viejos, está todo dicho, nos matarán a todos para ahorrarse nuestras pingües pensiones y así superar la crisis antes. Solo pido que cuando me llegue la hora, me maten de un porrazo antes que a pellizcos,será menos doloroso digo yo ¿no?.
ResponderEliminarLas recetas neoliberales traen detrás un menú de hambre y falta de salud que tarde o temprano estallan. La monarquía bien gracias… quizás preparando los puntos del próximo Pacto de la Moncloa, pero ni eso… se pegan tiros en los dedos, le pegan tiros a los animales, mientras muchos súbditos siguen ajusticiando toros drogados, clavando espadas para ver brotar la sangre… olé.
ResponderEliminarMientras, los medios venden humo –como siempre-, y los falangistas comienzan a sujetar la soga, para que nadie se les escape y el PP juega con la Argentina defendiendo la propiedad PRIVADA extranjerizada.
En fin, nada diferente a otras latitudes, con la diferencia, que ustedes todavía tienen Rey ante el cual arrodillarse, sumado a la Iglesia, a los franquistas y a los del PP, el FMI, el BM, Alemania… la lista se les está haciendo interminable. Pero todos andamos igual, algunos intentando ponernos de pie, dejar de vivir de rodillas.
Me pregunto… si en estos días habrá aumentado el número de “Indignados”.
Esto recién comienza con los ajustes, aunque las idioteces de la Casa Real vienen de tiempos inmemoriales. Va mi solidaridad con el pueblo de España.
Un saludo.
Edgardo
HologramaBlanco
Tiempos duros estos en los que además de comprender las medidas tenemos que comprender que nos tomen por tontos...
ResponderEliminarEl problema es que muchos terminan creyendo la propaganda...
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